Publicado 31-07-2023

¿Elegimos los destinos de vacaciones por lo que vemos en Instagram?

En la era digital, las redes sociales han transformado la manera en que interactuamos con el mundo, y esto no ha sido diferente en el ámbito de los viajes. Y es que, la influencia de Instagram en las decisiones de destino vacacional de los viajeros de hoy en día, es fundamental. Las nuevas generaciones, usan las principales plataformas sociales como buscador, y tienen en cuenta los destinos a los que viajan sus influencers preferidos.

La influencia de Instagram en las elecciones de viaje

Con el auge de los influencers de viajes y las fotografías impresionantes de playas idílicas, majestuosas montañas y exóticas metrópolis, no es sorprendente que plataformas tan visuales como Instagram o Tik-Tok se hayan convertido en una fuente de inspiración para millones de viajeros en todo el mundo.

En palabras de Jorge Espinós, CEO de VB Group, «Instagram ha transformado la manera en que nos conectamos con el mundo y, por supuesto, con los destinos turísticos. Las imágenes evocadoras que se comparten en esta red social nos transportan virtualmente a lugares paradisíacos, lo que suscita un deseo irresistible de explorarlos personalmente. No es de extrañar que tantas personas encuentren en Instagram la chispa que enciende su próxima aventura vacacional».

Un reciente artículo publicado por el Economista explica como Instagram, Youtube o TikTok se han convertido en un escaparate para millones de usuarios que aprovechan su impacto para subir contenidos relacionados con el tema y generar conversaciones. En este nuevo ecosistema participan personas de todo el mundo, lo que ha abierto un gigantesco abanico de posibilidades. De hecho, la estética es lo que atrae a la gente. Según el informe Avis 2019 Travel Trends, el 58% de los viajeros entre los 18 y los 34 años se ven influenciados por la estética de los lugares que aparecen en RRSS. Es lo que se conoce como factor "Instagram".

El poder del contenido generado por el usuario y las recomendaciones

El contenido generado por el usuario también desempeña un papel significativo en la toma de decisiones de cada viaje. Los usuarios de redes sociales, especialmente la denominada Generación Z, afirman que las fotos y reseñas de amigos, familiares o personas que siguen en Instagram influyen en sus decisiones de destino. Esto demuestra que, el impacto que las recomendaciones personales y las experiencias auténticas tienen en la percepción de un lugar y su atractivo turístico es muy importante a la hora de la decisión final de reserva de un viaje.

“El contenido generado por el usuario ha democratizado la promoción de destinos turísticos", afirma el representante de VB Group. «Ya no estamos limitados a las campañas publicitarias tradicionales; en cambio, el boca a boca digital a través de Instagram ha permitido que los viajeros compartan sus experiencias genuinas, creando conexiones emocionales con sus seguidores y generando un mayor interés en los destinos menos conocidos».

El desafío de la autenticidad y la sostenibilidad

Si bien Instagram ha democratizado la promoción turística, también ha planteado desafíos. La obsesión por compartir las experiencias más "instagrameables" ha llevado a la sobreexplotación y el turismo masivo en algunos destinos, lo que a menudo conduce a problemas de sostenibilidad y autenticidad. Estos son los principales factores interrelacionados:

  1. Efecto Insta-worthy: La creciente cultura de compartir imágenes impresionantes e "instagrameables" en Instagram ha llevado a que ciertos lugares se vuelvan extremadamente populares en poco tiempo. Las personas buscan visitar estos destinos con el objetivo de capturar fotos similares para sus propias cuentas, lo que genera una afluencia masiva de turistas convirtiéndolos en sitios “de moda”.

  2. Influencers que influencian: Los influencers de viajes, con su gran número de seguidores, tienen un poder significativo para promover destinos particulares. Cuando un influencer publica contenido destacado de un lugar específico, puede desencadenar una ola de interés y visitantes en busca de vivir experiencias similares. «En la agencia percibimos a menudocómo estas “tendencias» afectan, por ejemplo, al número de visitas en nuestra web de estos destinos o algunos similares» explica el responsable de VB Group.

  3. Presión social y de comparación: Las redes sociales fomentan la competencia social y el deseo de destacar por encima del resto en la era del llamado “postureo”. Muchas personas sienten la necesidad de visitar lugares aparentemente idílicos, para ser percibidos como personas exitosas por la gente que les rodea, reforzando así un supuesto estatus o diferencia social.

  4. Acceso a información: Instagram proporciona acceso inmediato a una gran cantidad de información sobre destinos turísticos. La facilidad de compartir imágenes y experiencias hace que los lugares remotos y desconocidos se vuelvan deseados por todos y crezca la demanda de visitas. En algunos casos, supone un chute de energía para el turismo de la zona, pero también, se puede correr el riesgo de exponerse demasiado y comenzar a perder el encanto.

  5. Búsqueda de 'likes' y validación social: La búsqueda de reconocimiento social a través de la obtención de "likes" y comentarios positivos en las publicaciones puede impulsar a las personas a buscar experiencias turísticas nunca antes vistas. Es el “todo por la mejor foto”.

  6. Desarrollo turístico no sostenible: El aumento repentino de la demanda turística puede superar la capacidad de infraestructura y servicios de un destino, lo que lleva a una presión excesiva sobre los recursos naturales, culturales y sociales del lugar. Esto puede conducir a problemas ambientales, degradación de sitios históricos y alteración de la vida local.

La realidad es, que el impacto de las RRSS en el turismo, es innegable, siendo un punto de partida imprescindible en el viaje de compra del consumidor. Además, el contenido segmentado por intereses y los algoritmos, suponen el conocimiento en profundidad del usuario, que acabará siendo impactado por lo que realmente quiere ver. Aunque, hay que tener cuidado con diferenciar qué es realidad y ficción, lo cierto es que las agencias de viaje del S.XXI comienzan en el idílico catálogo de Instagram o Tik-Tok.